Cuatro niños emprenden un viaje en barco alrededor del mundo con un gato, un kuango-mango y una gran tetera. Visitan lugares extraños y se encuentran con amables moscas que viven en botellas azules, con ratones que comen flan y estornudan al enfadarse, y con peces a los que, de tanto frío, les tejen vestiditos de lana.
Escrito en el siglo XIX en Gran Bretaña, este cuento se enmarca en la corriente de sinsentido de Lewis Carroll.

Edward Lear nació en 1812 en Inglaterra y murió en 1888 en Italia. Fue pintor de paisajes desde los 15 años, se volvió famoso por su original escritura en clave de sinsentido y por popularizar los limericks. Fue el más joven en su familia después de sus veinte hermanos y hermanas. Desde 1837 Lear vivió lejos de su hogar de origen, y aunque era tímido, fue un intrépido viajero: exploró Italia, Grecia, Albania, Palestina, Siria, Egipto, India y lo que hoy es Sri Lanka (en aquel entonces Ceylan). Su gran amigo fue Foss, su gato.